FCE: Desde 2019 detectamos “gastos irracionales” en filial de Colombia

El Fondo de Cultura Económica informa que hay abierta una investigación; en cuanto la contingencia sanitaria lo permita, se hará el relevo del director, agrega

Paco Ignacio Taibo II (izq.) y Nahum Montt, en mayo de 2017, en Azcapotzalco.
Paco Ignacio Taibo II (izq.) y Nahum Montt, en mayo de 2017, en Azcapotzalco.Foto: Especial
Por:

El Fondo de Cultura Económica (FCE), que dirige Paco Ignacio Taibo II, desde noviembre de 2019 detectó “una serie de gastos irracionales” en su filial de Colombia, producto de la contratación de empresas externas que duplicaban las funciones administrativas del FCE, informó este domingo la editorial paraestatal.

“A partir de eso se abrió una investigación, que descubrió proyectos de ampliación de la filial no autorizados, gastos indebidos en una tarjeta corporativa, una confusa administración del parking, despidos improcedentes…”, informó en un comunicado, luego de que La Liga Contra el Silencio publicara una investigación en la que se señala que Nahum Montt, director de la FCE en Colombia, firmó contratos millonarios entre el Fondo y tres sociedades sin trayectoria con las que su hijo, Germán Montt, está vinculado.

De acuerdo con La Liga Contra el Silencio, desde mediados de 2019, Montt había usado la tarjeta de crédito corporativa para compras que no tenían que ver con sus funciones, como servicios en el centro de estética Arco Iris Spa y otros más en la tapicería Muebles y Cortinas, en la peluquería Ivonne, en la tienda de cosméticos Perfumería Sutil y en el mega outlet de ropa Toberín.

También documenta que aunque la empresa Muysua SAS no tenía experiencia en el sector editorial, el 15 de abril de 2019, nueve días después de ser constituida, suscribió un contrato de prestación de servicios con el FCE Colombia por 216 millones de pesos colombianos, pagados en cuotas mensuales durante el transcurso de un año.

El FCE señaló que tras detectar las irregularidades en gastos indebidos, “inmediatamente se convocó al gerente de la subsidiaria Colombia, Nahum Montt, a la Ciudad de México y se celebraron reuniones con él los primeros días del año, que confirmaban que el control de la subsidiaria lo tenía una empresa externa y determinamos que esa y otras empresas cuyos servicios se habían contratado no tenían razón de ser y ocasionaron un quebrando a la institución”.

Aunque Nahum Montt, gerente de la subsidiaria Colombia, presentó su renuncia, que no fue aceptada ya que se le pidió que “debía dejar en orden todos los asuntos relacionados con la ruptura de los citados contratos y la deuda creada por el uso de la tarjeta corporativa, que debería ser repuesta al FCE, porque contravenía todas nuestras políticas de austeridad y el estilo de ausencia de privilegios que se habían establecido en la casa matriz, México”, indicó el Fondo.

La editorial paraestatal argumenta que de haber aceptado la renuncia de Montt de inmediato, “nos hubiéramos encontrado con convenios y contratos vigentes y la ausencia de un nuevo responsable, que cuando asumiera el cargo tendría que enfrentar una situación en la que el gasto se seguía produciendo”.

En cuanto las condiciones sanitarias lo permitan se revisará el cumplimiento de estos finiquitos y la culminación de proyectos no aprobados, agregó.

“En cuanto la contingencia sanitaria por la Covid-19 lo permita, se procederá al relevo en la gerencia de la subsidiaria. En este momento las condiciones lo hacen imposible, hasta que exista regularidad en el funcionamiento y las actividades comerciales de la propia subsidiaria en Colombia. 

Mientras tanto, Nahum Montt continúa laborando, pero en carácter de interino… En resumen, los contratos irregulares fueron eliminados desde los primeros días de enero del presente año”, concluyó.

kl