Luis Suárez debutó con la selección de Uruguay un 13 de octubre de 2007 en un partido de eliminatoria rumbo a Sudáfrica 2010 contra Bolivia. Y ese mismo día inició una cuenta que nueve años después le daría una distinción muy especial por encima de los grandes artilleros que ha dado el futbol sudamericano.
Contra la escuadra boliviana marcó su primer gol de 47 que acumula con el equipo celeste y por supuesto su primero en la etapa clasificatoria de Copa del Mundo. Ayer, un tanto suyo dio la ventaja transitoria a su escuadra ante Colombia, anotación que lo puso en la cima de los máximos goleadores en eliminatoria en la historia de la Conmebol empatado, por ahora, con otro histórico. Y lo hizo con la marca de la casa. Recibió un pase de cabeza de Stuani tras un envío largo de Godín, se quitó de encima a un zaguero y fusiló a Ospina con un derechazo cruzado al minuto 73.
Fue el tanto que en ese momento puso al cuadro uruguayo con ventaja en el marcador y el número 19 en procesos eliminatorios de la Conmebol, empatando a Hernán Crespo que también hizo 19, pero en menos juegos. Será cuestión de semanas, por el nivel que trae el delantero del FC Barcelona para que ese récord sea solamente de él.
Pese a que minutos después un tanto de Mina le dio a Colombia igualar el juego, el 2-2 dejó a los uruguayos muy cerca del Mundial de Rusia. Con 10 partidos disputados, ningún equipo que sumó a estas alturas de la eliminatoria 20 puntos quedó fuera de la Copa del Mundo.
Disputado en la humedad de Barranquilla, el duelo se le complicó a los visitantes, pues al minuto 12 un tiro de esquina cobrado por Muriel fue cabeceado a gol sin oposición por Aguilar.
Poco a poco el equipo de Óscar Tabárez se hizo con el control del juego, pese a que los locales no dejaban de tocar el balón y así al minuto 28, vía otro remate de cabeza, se empató la pizarra cuando el cotejo ya se jugaba bajo una torrencial lluvia; Cebolla Rodríguez aprovechó un desvío de la zaga cafetera y con un gran remate mandó el balón al fondo de la red.
Uruguay, con el 2-1, ya se sentía en Rusia y Colombia debió sacar el orgullo para rescatar el partido. Mina controló el balón, cedió para Cuadrado y corrió hacia el área para esperar un centro; éste llegó y el zaguero con un remate fortísimo con la cabeza superó a Muslera, quien se quedó parado viendo como el balón entraba en el ángulo.
