¿Qué puede hacer un fan por un artista? ¿Hasta qué punto llega la entrega de una persona por su cantante favorito? Son preguntas que fueron respondidas antes, durante y después del concierto de J-Hope, integrante de BTS, quien volvió a México tras ocho años de ausencia y fue recibido de una manera especial: con cartas que su ARMY reunió en un gran contenedor afuera del Palacio de los Deportes, con mariachis que le llevaron en los alrededores del recinto, con mensajes de amor en carteles, con alegría reflejada en decenas de jóvenes corriendo hacia los accesos del inmueble, con canciones como ”Cielito lindo” que su fandom entonó previo al show, así como gritos y cantos que nunca pararon durante poco más de dos horas de concierto.
Esa entrega fue mutua, porque J-Hope sintió todo ese cariño y por eso en una parte del espectáculo les dijo en coreano con una traducción al español: “Si siguen así, me van a dar ganas de quedarme en México… Me hacen sentir como en casa, son increíbles, quiero dar un show más grande todavía… Cuando digo esto no es broma, este momento nunca lo voy a olvidar, va a estar en mi corazón”, expresó contento y formó un corazón con sus manos para después soltar: “Te amo mucho, México”, en español.
- 22 temas interpretó durante el show de la noche del sábado
Sus seguidores, en su mayoría jóvenes de entre 15 y 30 años, enloquecieron y los gritos aumentaron, al igual que el ruido que hicieron con sus pies, logrando que el Palacio de los Deportes retumbara como nunca. Además, resonó “J-Hope, hermano, ya eres mexicano”, una y otra vez.

Godzilla y Kong: Supernova, esta es la fecha de estreno y el reparto de la película
El espectáculo comenzó con un video en el que se vio al artista en dos escenas: en una estaba vestido de negro entre la nieve y, en otra, acostado sobre una cama con un atuendo rojo. En cada bloque del concierto se proyectó un cortometraje que evocaba a sus proyectos musicales.
La aparición de J-Hope fue espectacular: sobre una plataforma cubierta con una tela roja. Al verlo con un atuendo que evocaba a Michael Jackson —un guante con detalles en diamantes— su ARMY gritó hasta dejar sordo a más de uno de los asistentes. Las primeras canciones que interpretó recordaron los inicios de su carrera en solitario: “What if…” y “Pandora’s Box”, de su álbum Jack In The Box.

- 2 conciertos ofreció en el Domo de Cobre de la CDMX
También incluyó la icónica “Arson”, en la que “incendió” el escenario, tanto en las proyecciones de las pantallas como en los fuegos artificiales que le dieron un toque explosivo al número.
“Me gusta mucho México”, dijo en español para dar la bienvenida a sus fanáticos que llevaron su ARMY Bomb (lightstick de BTS) para también ambientar el espectáculo, a veces tiñendo el Domo de Cobre de rojo y otras, de color blanco o amarillo.
Para “MORE”, J-Hope sorprendió al subir en una estructura que se colocó en el centro del escenario. Bailarines lo acompañaron con coreografías que emocionaron al público.
La segunda parte del show, que forma parte de la gira Hope on The Stage, fue todavía más sorprendente, porque bailarines hicieron una digna exhibición de break dance. Después, J-Hope apareció con un atuendo street style: gorro, chamarra y pantalones de mezclilla para entonar algunos éxitos de su álbum Hope on The Street Vol. 1.
Con “lock/unlock” se proyectaron imágenes de ciudades. Parecía que J-Hope caminaba por esos lugares. Esta parte del concierto destacó por los diversos números de baile, tanto los que estuvieron a cargo del cantante, como los de los ejecutantes que lo acompañaron. En una de las canciones cayó confeti en la pista.
Sin duda, una de las canciones que más entonaron sus seguidores fue “Sweet Dreams” con la que J-Hope volvió a demostrar su talento en el baile. Cuando movía sus caderas, su fandom gritaba con todas sus fuerzas. La emoción aumentó cuando interpretó “Mona Lisa”. Fue tanta la energía que dijo: “Esto es muy loco”.

También hubo oportunidad para saludar a sus fans, pues J-Hope bajó del escenario para cantar cerca de sus emocionadas seguidoras.
En el concierto incluyó otros éxitos como “Daydream”, en el que apareció cantando sobre una cama, y “Chicken Noodle Soup”, que originalmente interpreta con Becky G. Además de derrochar talento, el artista tuvo algunas interacciones con el público, como cuando les pidió que se agacharan para saltar con todas sus fuerzas.
Entre gritos eufóricos, como si no hubiera transcurrido ningún minuto del concierto, pues la energía nunca paró, pasadas las 22:00 horas el show finalizó. Para muchas fue un sueño cumplido, pues era su primera vez en un concierto de J-Hope.

