El nombre de Nicolas-Jacques Charrier aparece inevitablemente cuando se habla de la vida íntima de Brigitte Bardot, la actriz francesa que marcó una época en el cine y la cultura popular del siglo XX.
Con la reciente muerte de la famosa, muchos se han preguntado sobre su vida personal, incluyendo a su hijo Nicolas, quien tiene actualmente 65 años, y su difícil relación. En La Razón te contamos qué pasó.
¿Quién es el hijo de Brigitte Bardot y por qué lo repudiaba?
Nicolas-Jacques Charrier nació el 11 de enero de 1960, fruto del matrimonio de Brigitte Bardot con el actor Jacques Charrier. Sin embargo, desde el inicio, la relación entre madre e hijo estuvo marcada por la distancia y el desencuentro.
Brigitte Bardot, quien se convirtió en ícono mundial a los 26 años, confesó en varias ocasiones que la maternidad no fue un deseo propio, sino una circunstancia que la sobrepasó.
En su autobiografía llegó a declarar que habría preferido “parir un cachorro” antes que tener un hijo, frase que generó gran polémica y que reflejó el rechazo que sentía la actriz hacia la maternidad. Esa postura se tradujo en una relación fría con Nicolas, quien fue criado principalmente por su padre y por la familia paterna, lejos del entorno glamuroso al que estaba acostumbrada Bardot.
El vínculo entre madre e hijo se deterioró aún más tras el divorcio de Brigitte Bardot y Jacques Charrier, en 1962. Nicolas fue educado en un entorno muy privado y discreto, por lo que con el paso de los años se distanció de la vida pública.
La actriz Brigitte Bardot, por su parte, continuó con su carrera cinematográfica y posteriormente con su activismo en defensa de los animales, convirtiéndose en una figura polémica y admirada por sus contradicciones. Sin embargo, la relación con su hijo nunca logró recomponerse.
Ya siendo adulto, el hijo de la cantante se estableció en Noruega, donde formó una familia y se mantuvo alejado de los reflectores que acompañaron siempre a Bardot. Su fue tan malo que, cuando Nicolas-Jacques se casó con la modelo Anne-Line Bjerkan, su madre no estuvo en la lista de invitados. De esa unión nacieron dos hijas, Theo y Anna.
Brigitte Bardot siempre reconoció que su trayectoria artística y las decisiones personales que tomó la llevaron a distanciarse de Nicolas. Sin embargo, dejó claro en su biografía que nunca dejó de sentir afecto por él: “Lo quiero de una manera especial. Y él también me quiere”.
Además, señaló que su hijo había heredado varios rasgos de su carácter y personalidad. Años más tarde reveló en varias entrevistas que él la visitaba una vez al año.


