El gobernador de Durango, Esteban Villegas Villarreal, solicitó la intervención de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER) para que grandes empresas, como SUKARNE, prioricen la compra de ganado local, como medida ante el cierre de la frontera para exportación y la amenaza del gusano barrenador en otras regiones del país.
De acuerdo con un comunicado del gobierno estatal, la propuesta fue presentada directamente por Villegas Villarreal al titular de SADER, Julio Berdegué, con el objetivo de mitigar los impactos económicos que ha generado la tercera suspensión nacional de exportaciones.
“La idea es que el ganado que no puede salir del país pueda colocarse en el mercado nacional, con empresas como SUKARNE. Esto nos ayudaría a mantener el movimiento económico y darle oxígeno a los productores en este momento tan complicado”, informó, en su nombre, Jesús López Morales, secretario de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de Durango (SAGDR).
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Villegas también insistió en que el gobierno federal avance en un modelo de regionalización, que permita a entidades libres del gusano barrenador, como Durango, continuar con sus exportaciones.
“Esto no se va a resolver en semanas. Va a tomar años. Pero nosotros hemos hecho bien las cosas, y eso debe reconocerse”, enfatizó López Morales, al subrayar que Durango mantiene vigente su certificación del USDA, renovada en 2024, y cuenta con 154 exportadores registrados.
El funcionario detalló que la entidad mantiene vigilancia sanitaria estricta y permanente. “Ningún animal puede ingresar sin autorización ni sin los permisos de internación, especialmente si proviene de países como Nicaragua, que ya reporta más de 19 mil casos del gusano barrenador”, advirtió.
Además, puntualizó que el gobierno estatal y el Comité de Protección Pecuaria vigilan estrechamente las entradas, especialmente por el puerto de Mazatlán.
Finalmente, el comunicado reafirma que el compromiso del gobernador es proteger la sanidad del hato ganadero, evitar contagios y defender a un sector que representa una fuente de ingresos para más de 50 mil familias duranguenses.
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