La conmemoración del Día Internacional de la Mujer, este 8 de marzo, inundó las calles de diferentes ciudades en la República Mexicana, donde oleadas de mujeres vestidas de morado y verde, colores del movimiento feminista y de la lucha por la despenalización del aborto, alzaron la voz y con perfomance, manifestaciones y algunos pronunciamientos, exigieron justicia y respeto a sus derechos.
En Ciudad Juárez, Chihuahua, lugar que salió a la luz por el gran número de feminicidios que han enlutados los hogares juarenses, cerca de cinco mil mujeres marcharon desde el monumento a Benito Juárez hacia la llamada Cruz de Clavos, en las inmediaciones de las garitas de cobro del Puente Santa Fe, donde reclamaron que se encuentre a sus mujeres desaparecidas.
Asimismo otros colectivos caminaron por diversas avenidas de la ciudad sin que se reportaran enfrentamientos o hechos de violencia. De acuerdo con las organizadoras alcanzaron siete mil asistentes, el mismo número que el año pasado.
Asisten más de 600 mil a evento de Sheinbaum en el Zócalo: Segob CDMX; concluye con saldo blanco
En Oaxaca, policía dispersa marcha del 8M con gas pimienta
Pero en Oaxaca la situación no fue tan favorable, ya que durante la marcha del 8M elementos del grupo antimotines de la policía estatal dispersó con gas pimienta a las mujeres que se manifestaban, sin importar que entre ellas fueran menores de edad, incluso, bebés, familias completas y turistas que se encontraban en el lugar.
Exigen justicia por desaparecidos en Monterrey
En tanto, en Monterrey padres del colectivo de búsqueda Amores de Nuevo León, protestaron en la explanada de los Héroes de aquella ciudad, exigían justicia y la aparición de sus hijas.
“No queremos más madres en las calles buscando a sus hijas, más familias rotas por la impunidad. Hoy alzamos la voz por todas las mujeres, por las desaparecidas, las que fueron asesinadas, las que aún buscamos, porque su ausencia duele y su memoria vive”, demandaron.
Reclaman en Guerrero por feminicidios
En la costera Miguel Alemán de Acapulco, Guerrero, marcharon aproximadamente 400 mujeres encabezadas por las colectivas de madres, esposas, amigas y hermanas buscadoras, y otro bloque por madres con sus hijas y mujeres embarazadas, quienes al grito de “justicia, justicia, vivas nos queremos”, reclamaron que la prevención e investigación de los feminicidios, sigue siendo un tema pendiente del gobierno estatal.
En Veracruz se registraron algunos hechos de violencia, como en Orizaba, donde feministas se enfrentaron con personas defensoras de la vida que se encontraban en el Monumento a la Madre, de aquella ciudad, que no se salvó de las pintas por parte de las manifestantes. También destrozaron vidrios de puertas y ventanas del edificio histórico del centro de esa ciudad conocido como el Palacio de Hierro.
Por su parte, en Xalapa miles de integrantes de colectivas feministas y familiares de víctimas de desaparición y feminicidio, marcharon rumbo al Congreso de Veracruz dejando una estela de pintas en inmuebles y vialidades. Protestaron frente al Tribunal Superior de Justicia del Estado, demandaron la falta de acceso a la justicia.
Miles de mujeres se vuelcan a las calles de Michoacán y Chiapas
En la ciudad de Morelia, Michoacán, mujeres marcharon e instalaron un tendedero del acoso; mientras que integrantes del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo, se manifestaron con el objetivo de reconocer a la mujer trabajadora e indígena. Fue en el bosque Cuauhtémoc donde se instaló un tendedero del acoso, donde algunas de ellas compartieron, de forma anónima, testimonios sobre el acoso que han sufrido.
En Chiapas se escuchó la voz de mujeres indígenas de la comunidad de Acteal, municipio de Chenalhó, donde exigieron justicia por todas las mujeres que han muerto a consecuencia de la violencia en esa zona, causada por conflictos sociales y el crimen organizado.
A través de un comunicado, las sobrevivientes de la masacre de diciembre de 1997 acusaron que las indígenas son violentadas tanto por el Estado como por los varones, sin que hasta ahora hayan justicia para ellas.
“Esta situación nos recuerda a nuestras hermanas, a quienes les fue arrebatada la vida de la manera más cruel, como a las embarazadas a quienes les abrieron el vientre para matar a sus bebés y fueron ultrajadas en 1997. Muchas mujeres, muchachas y niñas murieron sin tener ninguna culpa” y refirieron que, por usos y costumbres, desde pequeñas les fomentan a sentirse menos que los varones.
De acuerdo a cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) los feminicidios en México se han incrementado alarmantemente en los últimos años y la población más afectada son mujeres jóvenes, niñas y adolescentes.
Según las cifras publicadas por el Gobierno federal, entre enero y agosto de 2023 se registraron 46 feminicidios en mujeres de entre 0 y 17 años; mientras que en el mismo periodo de 2024 la cifra se elevó 54.
cehr
