La Cuaresma es un periodo de reflexión, en el que se realizan pequeños sacrificios para llegar a la Semana Santa y a la Pascua. Uno de ellos es el evitar comer carnes rojas, situación que cambia las formas de alimentación de las familias católicas, sobre todo los viernes.
Así, miles de creyentes se preguntan qué alimentos se pueden consumir durante la Cuaresma, como parte de la abstinencia de ciertos placeres o realizar actos de caridad como una forma de sacrificio y reflexión espiritual.
¿Qué se puede comer el viernes?
En La Razón de México, te contamos qué se puede comer durante la Cuaresma, específicamente los viernes, con platillos hechos para este periodo:

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- Ceviche: Pescado crudo marinado en jugo de limón con jitomate, cebolla y cilantro
- Pescado a la veracruzana: Filetes cocidos en una salsa de jitomate con aceitunas y especias
- Mojarra frita: Un plato típico donde la mojarra se fríe entera y se acompaña con ensalada
- Tacos de pescado: Preparados con pescado capeado
- Romeritos: Un platillo tradicional mexicano que combina romeritos con mole y tortas de camarón
- Capirotada: Un postre Cuaresmal hecho con pan duro, leche, azúcar o piloncillo, pasas y cacahuate

También se pueden realizar preparados como las tortitas de papa, ensaladas con pollo, o cualquier otro platillo que se desee, siempre y cuando no contenga carnes rojas.
Datos importantes sobre la Cuaresma
La Cuaresma comienza el Miércoles de Ceniza y se extiende hasta el Jueves Santo, justo antes del Triduo Pascual, los tres días de preparación previo a la fiesta de Pascua. La duración de este periodo es de 40 días, excluyendo los domingos, lo que simboliza los 40 días que Jesús pasó en el desierto en ayuno y oración.
Este tiempo busca preparar a los creyentes para la celebración de la Pascua, la festividad más importante del cristianismo que conmemora la resurrección de Jesucristo.
La Cuaresma ofrece múltiples beneficios espirituales como son los siguientes:
- Renovación Espiritual: Es una oportunidad para renovar la fe y fortalecer la relación con Dios
- Disciplina Personal: A través del ayuno y la abstinencia, los fieles practican la autodisciplina y el autocontrol
- Conciencia Social: Al realizar actos de caridad, los cristianos desarrollan una mayor conciencia y empatía hacia los menos afortunados

