El secretario de Agricultura, Julio Berdegué, sostuvo una llamada con su homólogo de Estados Unidos, Brooke Rollins, para abordar la entrega de agua para este año, como parte del nuevo frente de amago arancelario.
El funcionario mexicano detalló que también hablaron sobre el programa de tecnificación de riego en Baja California, Chihuahua y Tamaulipas.
Julio Berdegué indicó que México tiene el compromiso de cumplir con el Tratado de Aguas de 1944, “bajo las consideraciones de sequía que hemos tenido en estos últimos años”.

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“Dialogamos sobre las entregas de agua para 2025, así como el programa de tecnificación de riego en los distritos 014 en Baja California, 005 y 009 en Chihuahua, y 025 y 026 en Tamaulipas. Seguiremos trabajando conjuntamente para beneficio de ambos países”, escribió el secretario de Agricultura en la red social X.
En tanto, la secretaria de Agricultura estadounidense, Brooke Rollins, calificó la llamada con Julio Berdegué de productiva. En dicho acto también estuvo presente el subsecretario de Estado, Chris Landau.
“La agricultura estadounidense lleva años pidiendo este alivio y no lo ha conseguido. Lo que ha cambiado ahora es que hay un presidente estadounidense dispuesto a hacer lo necesario para que esto suceda”, informó la funcionaria estadounidense.
Lo anterior ocurrió después de que la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, prometió la “entrega inmediata” de agua al estado de Texas, tras los reclamos del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien advirtió el jueves de imponer aranceles a México por “violar” el Tratado de Aguas binacional.
“A los agricultores de Texas, que son quienes están pidiendo el agua, va a haber una entrega inmediata de un número determinado de millones de metros cúbicos que se puede dar, de acuerdo con la disponibilidad de agua que exista en el (río) Bravo”, expresó.
Reiteró que la Comisión Internacional de Límites y Aguas “está buscando propuestas técnicas que permitan que se cumpla” con el acuerdo en la medida de lo posible ante la sequía en la región.
La presidenta de México descartó que vaya a haber un conflicto o una renegociación del Tratado de Aguas, pues existe una mesa de trabajo para fortalecer la comunicación entre ambos países.

