La reforma constitucional que permite la elección directa de jueces, magistrados y ministros busca colocar a la ciudadanía en el centro del sistema judicial, aseguró Paula María García Villegas Sánchez Cordero, aspirante a ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Desde su perspectiva, la transformación del Poder Judicial no debe entenderse como un simple ajuste institucional, sino como un mecanismo para abrir espacios de participación ciudadana real en la administración de justicia. “Esta elección es de ellos, es de ustedes, de nadie más”, afirmó en entrevista radiofónica.
García Villegas, actual magistrada del Décimo Primer Tribunal Colegiado en Materia Administrativa del Primer Circuito, explicó que la legitimidad del nuevo esquema se consolidará a través de la calidad de las sentencias. En su opinión, los criterios judiciales deben mantenerse firmes en técnica, justicia y legalidad, y proteger los derechos fundamentales.
“Que sea justa, que tenga técnica, que sea legal, que sea protectora de derechos fundamentales, que sea el fiel de la balanza”, señaló. También descartó cualquier periodo de ajuste dentro del Poder Judicial. Para ella, el momento requiere experiencia y preparación inmediata. “Un buen perfil fortalece al sistema de administración de justicia, un mal perfil lo debilita”, sentenció.
La candidata consideró errónea la idea de comparar este proceso con una consulta o una revocación de mandato. “Nada más alejado de eso”, expresó. Subrayó que el alcance de la reforma no se limita a evaluar a quienes ya están en funciones, sino que define la integración de un nuevo poder, tanto a nivel federal como en diversas entidades del país.
García Villegas explicó que su postulación se basa en su trayectoria profesional y no en factores externos. Indicó que no utilizó recursos públicos para financiar su campaña, lo cual representó una dificultad adicional en la organización y ejecución de sus actividades.
Identificó también una serie de obstáculos normativos que, según dijo, no responden a la dinámica de una elección real. Mencionó como ejemplo la exigencia de notificar con cinco días de anticipación los actos públicos. A su juicio, esa regla resulta inviable. “Materialmente imposible”, declaró. Propuso revisar este marco antes de la contienda de 2027.
Ante los cuestionamientos por su relación con la ministra en retiro Olga Sánchez Cordero, respondió que su interés por el derecho surgió desde el entorno familiar, pero insistió en que su carrera la llevó de manera independiente.
Al finalizar, reiteró la importancia de un proceso transparente y libre de interferencias. Llamó a la ciudadanía a ejercer su voto con conciencia. “Si se sesga por alguna razón o hay una política de Estado, esto pierde, perdemos todos”, concluyó.
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FGR
