Activistas y familiares denunciaron que los datos de personas detenidas en el Alcatraz de Caimanes, ubicado al oeste de Miami, Florida, están siendo ocultados por las autoridades de Estados Unidos, por lo que expresaron su temor de que estén siendo víctimas de desaparición forzada.
Javier Calzada, representante de la asociación Migrant Heroes, que ha documentado las vejaciones a la comunidad migrante durante los recientes meses, advirtió que en el peor de los casos, algunos de los migrantes detenidos “no están siendo expuestos en las listas que el Gobierno presenta, y para muchos de sus familiares, entonces, ellos están desaparecidos”.
Además, el senador estatal demócrata Carlos Guillermo-Smith, uno de varios legisladores de Florida que recorrieron recientemente el centro de reclusión, dejó saber que los registros compartidos por quienes operan el lugar “ofrecen una visión parcial de quienes están en la instalación”.

¿Qué quiere decir Matria y por qué lo dijo la Presidenta, Claudia Sheinbaum?
- El Dato: El jueves una jueza federal ordenó suspender temporalmente la ampliación en las obras de construcción del centro, mientras se determina si viola las leyes ambientales.
El legislador agregó que “la red de remolques y carpas, construida sobre una pista aérea cerca de la autopista US 41, lleva pocos días en operación y ya albergaba a unos 750 inmigrantes detenidos, sin datos precisos”.
Los activistas y familiares de las personas recluidas en este lugar, rodeado de peligro y sin un nivel operativo de seguridad mínima, denunciaron que “el estado se ha negado a divulgar públicamente la lista completa de detenidos; ha difundido información selectiva”.
El centro de detención migratoria Alcatraz de Caimanes es catalogado por políticos estadounidenses de derecha, afines a la visión de Trump, como “la prisión a la que son enviados todos los viciosos y trastornados”, de acuerdo con medios en ese país.

Lo anterior es una burla para familiares de los migrantes detenidos, que responden a esas declaraciones de manera contundente.
“Ni viciosos, ni trastornados, pero eso sí, algunos fueron desaparecidos días enteros hasta que supimos que estaban en el Alcatraz de Caimanes”, dijo Marie, de origen mexicano —quien prefirió reservar su identidad por temor—, comentó que su esposo hondureño está retenido en ese sitio y aseguró que llamar a los migrantes detenidos con calificativos de esa magnitud sólo incitan al odio y al escrutinio público.
“Por el momento no puedo decirte muchos datos, porque realmente a mí me da angustia que a mi esposo le hagan algo allá adentro de donde está. Le decía a mi hija que éstos son capaces de echarlos a los cocodrilos, ya todo se espera de esta gente, porque no han sido humanos con nuestra gente.
“Mi esposo trabajaba como gerente de un restaurante y era muy amable, muy querido; ahora me lo tienen encerrado y está adentro por nada; no tiene algún tipo de antecedente, salvo que el año pasado pisó raya cuando estaba por ir a trabajar”, dijo.
Mientras, muchos migrantes no aparecen en las listas de la prisión, aunque hayan ingresado a ese lugar, y no es reportado su estatus.
El litigante Javier Calzada, de la asociación Migrant Heroes, dijo que entre los detenidos acusados o condenados por delitos hay más de 250 personas que aparecen como infractores únicamente de normas migratorias, sin antecedentes penales en Estados Unidos.
“Esto ya es de dominio público, estos datos. La mayoría de las personas no tiene algún dato que atente contra sus entornos, sólo mucho odio desde el despacho oval.
“Los datos provienen de una lista de más de 700 personas que están detenidas bajo carpas y en celdas de malla metálica en el centro temporal de detención del estado en los Everglades de Florida, o que figuran programadas para ser enviadas allí”, dijo el activista.
Refirió que del total de detenidos en Alligator Alcatraz, solamente un tercio tiene condenas penales, con cargos que van desde intento de asesinato hasta reingreso ilegal e infracciones de tránsito.
Asimismo, algunos detenidos sólo tienen cargos pendientes y los registros del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) no revelan la naturaleza de los supuestos delitos.
Además, las más de 60 familias que han detectado irregularidades en los procesos de detención de sus familiares comenzaron a alzar la voz por estos hechos. Mencionaron que, entre otras cosas, el senador estatal demócrata Carlos Guillermo-Smith relató que los documentos muestran que los detenidos provienen de unos 40 países.
“Los originarios de México, Guatemala y Cuba representan aproximadamente la mitad de la lista. Las edades oscilan entre los 18 y los 73 años. Uno figura como ciudadano estadounidense.
“Los reporteros no pudieron localizar a su familia ni abogado, algunos de ellos están desesperados y sólo quienes estamos atentos a todo este infierno hemos podido ayudar a aquellos migrantes que hoy están encerrados y que no han podido contactar con su familia”, dijo la pariente de un preso migrante que prefirió no dar su nombre por miedo a represalias a su familiar.
Organizaciones como la Coalición de Inmigrantes de Florida (FLIC) ha señalado violaciones a los derechos humanos, en este centro de reclusión, lo cual incluye negligencia médica, falta de acceso a defensa legal, uso excesivo de esposas, encierro en jaulas y detención de personas sin antecedentes penales.
El centro enfrenta dos demandas judiciales, una de ellas, por defensores de derechos migratorios encabezados por la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU).

