Sin el apoyo de los partidos de oposición que se montaron en el movimiento, los jóvenes de la agrupación Generación Z salieron nuevamente a las calles en la llamada Marcha Nacional del Silencio por la Paz, con una escasa participación y desencuentros entre asistentes. El grupo orientará su agenda a la crisis de vivienda y las desapariciones en el país.
Aproximadamente 300 manifestantes, compuestos por los jóvenes de Generación Z, adultos mayores, grupos provida, fanáticos de la Virgen de Guadalupe y personas en contra de Morena, marcharon del Ángel de la Independencia hacia Bellas Artes.
Durante la marcha, la Generación Z demandó justicia para los 133 mil 549 personas desaparecidas del país, acceso a medicinas y mayor seguridad. El vocero de la agrupación, Iván Rejón, reiteró además, que su movimiento es apartidista.

Marcha de la Generación Z reúne a unas 300 personas en la CDMX

“Estamos en contra de que el gobierno celebre que haya una transformación. No estamos en contra de algún partido político directamente, sino de la ineficiencia y la ausencia de las autoridades para solucionar las crisis”, dijo el joven.
En entrevista con La Razón, Rejón reconoce que su movimiento es que no cuenta con exigencias concretas. Por ello, buscarán definir una propuesta política para el siguiente año: “Las consignas que van con nosotros son vivienda, las desapariciones, las 40 horas laborales, el derecho a la sexualidad de cualquiera, etc. Más adelante las discutiremos y para 2026 planeamos tener una propuesta más concreta y sólida” dijo a este diario.
El vocero rechazó que partidos de oposición como Acción Nacional (PAN) o el Revolucionario Institucional (PRI) tengan injerencia en la Generación Z, aseveración que hace tras revelarse la intervención partidista en el movimiento.
“Si hay una confrontación, los partidos serán los primeros en irse. Los invitamos a participar, pero la postura es deslindarnos de ellos, aunque hay puertas abiertas, tenemos filtros, como que ningún vocero esté afiliado a un partido”, dijo.
No se reportó ningún incidente violento tras la protesta, pues los asistentes se movilizaron vestidos de blanco y en silencio, y sostuvieron un puño en alto en señal de lucha pacífica.
Algunos manifestantes gritaban “¡fuera Morena!” al pasar frente al Senado de la República y el Palacio de Bellas Artes. La Generación Z respondía con la consigna: “¡PRI, PAN, Morena, la misma chin…!”.
Otra división de la marcha se dio cuando los jóvenes decidieron no continuar hasta el Zócalo para no afectar la venta de un tianguis navideño y un grupo de adultos mayores insistía en avanzar.
Paralela a la movilización en CDMX, la Generación Z convocó a la manifestación en los otros estados. No obstante, en varias entidades como Morelos, Michoacán y Aguascalientes, las marchas fueron canceladas por la casi nula participación.

