"Legitimación de una dictadura"

Lamenta PAN representación mexicana en toma de protesta del presidente de Nicaragua

Mariana Gómez del Campo criticó que el presidente López Obrador decidiera enviar representación de México a la toma de protesta de Daniel Ortega 

Mariana Gómez del Campo, secretaria de Asuntos Internacionales del PAN.
Mariana Gómez del Campo, secretaria de Asuntos Internacionales del PAN.Foto: Especial.
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La secretaria de Asuntos Internacionales del PAN, Mariana Gómez del Campo lamentó que el Presidente Andrés Manuel López Obrador contravenga las decisiones de sus secretarios de Estado, al enviar un representante a la toma de protesta del mandatario de Nicaragua, Daniel Ortega, lo que resta credibilidad a la política exterior y demuestra obstinación del Ejecutivo.

Este martes el Jefe del Ejecutivo decidió que el encargado de negocios de la Embajada de México en Nicaragua, Ramiro Ayala asistiera a la toma de protesta, ya que Andrés Manuel López Obrador aseguró que “sería una imprudencia si México no acude, pues este acto atentaría contra la política de autodeterminación de los pueblos”. Además señaló que el país tiene una buena relación con todos los países de Centroamérica.

A través de un comunicado la panista repudió la representación que México tuvo en la legitimación de la dictadura de Nicaragua, ya que al estar en el acto, se ubica entre los países que están en la lista que violan los derechos humanos de la población.

“Repudiamos estar nuevamente en la lista incorrecta, a lado de países como Belarús, Cuba, Nicaragua y Venezuela; todos violadores sistemáticos de los derechos humanos, mientras la comunidad internacional ha decidido no reconocer el fraude electoral perpetrado por Ortega en noviembre del año pasado, y por el contrario incluso, ampliar las sanciones, como lo hizo el Consejo Europeo el día de ayer”, destacó en la misiva.

La también diputada federal dijo “empezamos el año con el pie izquierdo una vez más en cuanto a la política exterior con este gobierno”, ya que no se puede validar a gobiernos como el de Nicaragua que para ganar, encarceló a más de 170 personas, todos ellos presos políticos del régimen, de los cuales 36 son los principales líderes de oposición.

lemm.