Un concierto de hip hop en el que había más de 1,500 personas, la mayoría jóvenes entre 14 y 25 años en una discoteca terminó en tragedia en Macedonia del Norte la madrugada de ayer. El saldo preliminar es de 59 muertos y 155 heridos, de los cuales 22 hasta el cierre de la edición se mantenían en estado crítico.
El hecho ocurrió en la presentación de DNK, uno de los grupos más famosos del pequeño estado balcánico. Las primeras investigaciones sugieren que se debió al uso de dispositivos pirotécnicos “para crear efectos de luz” durante el concierto que se celebraba en el club.
Al encenderse, “las chispas alcanzaron el techo, que estaba hecho de un material fácilmente inflamable, tras lo cual el fuego se extendió rápidamente por toda la discoteca, generando una densa humareda”, explicó el ministro de Interior Panche Toshkovski.
Añadió que “la empresa no tiene una licencia legal. Puedo decir ésta licencia, como otras en el pasado, está relacionada con el soborno y la corrupción”.
Muchas de las víctimas, entre ellas cuatro niembros del grupo musical, murieron por asfixia y otras quemadas.
