Silencio, humo y esperanza

Cónclave: Especulación y expectativa tras 1.a fumata negra

Los cardenales reanudan hoy la elección en un cónclave marcado por la diversidad y el legado de Francisco; la atencion mundial se mantiene en espera de la fumata blanca

Humo negro sale de la chimenea de la Capilla Sixtina, ayer. Foto|Reuters

La densa columna de humo negro que emergió al caer la tarde de ayer desde la chimenea de la Capilla Sixtina no sólo marcó el inicio formal del cónclave, sino que también dejó al descubierto las complejidades que enfrenta la Iglesia católica para definir a su nuevo líder. Tras una única votación sin acuerdo, los 133 cardenales electores, reunidos bajo el más estricto hermetismo, reanudan hoy el proceso con cuatro rondas diarias de sufragio: dos por la mañana y dos por la tarde.

  • 45 mil personas vieron la primera fumata negra, en la Plaza de San Pedro

La jornada de este jueves comienza con la misa y los laudes en la Capilla Paulina antes del traslado a la Capilla Sixtina, donde a las 9:15 horas (hora local) inician las nuevas votaciones. La primera fumata del día se hace al mediodía y, de no alcanzarse un consenso, continuará la deliberación en sesión vespertina, con otra fumata hacia las 19:30 horas. Las normas prevén una pausa después de tres días sin resultados; es decir, si para el domingo no hay humo blanco, se detendrán momentáneamente las votaciones para reflexión y oración.

  • El Dato: La mayoría de los cardenales electores fueron designados por Francisco, lo cual sugiere una posible continuidad en la línea pastoral, aunque nada está escrito.

TENSIÓN CRECE. El cónclave se encuentra ante una encrucijada que va más allá de la elección personal. Las diferencias de visión, cultura y estilo pastoral entre cardenales de 70 países, incluidos representantes de regiones que por primera vez cuentan con un elector, como Mongolia o Tonga, imprimen al proceso una dimensión inédita. La huella global dejada por el Papa Francisco se traduce ahora en un colegio cardenalicio más amplio, diverso y joven, lo que complica los consensos tradicionales.

El nuevo Pontífice heredará un Vaticano transformado por la impronta reformista de Francisco. En el plano eclesial, se esperan definiciones sobre la participación de las mujeres en responsabilidades mayores, el enfoque hacia las personas LGBTQ+ y una pastoral menos centrada en Europa. En el terreno político y moral, pesará la continuidad o ruptura con la defensa del medioambiente, el enfoque sobre la migración y la promoción de una Iglesia “pobre para los pobres”, lema que el Papa argentino convirtió en eje de su magisterio.

Sin embargo, uno de los temas más apremiantes que enfrentará el sucesor de Pedro será la credibilidad institucional. Las crisis por abusos sexuales minan la confianza de los fieles. Las víctimas, asociaciones laicas y obispos comprometidos con la transparencia exigen un liderazgo firme, con voluntad de justicia y reparación real.

Al exterior del Vaticano, la expectativa no mengua. Fieles, medios de comunicación y líderes políticos siguen atentos cada señal, cada humareda. En la Plaza de San Pedro, miles aguardan bajo el cielo romano con la vista puesta en la delgada chimenea. El silencio de los cardenales contrasta con el clamor de los creyentes que desean un pastor que sane heridas, unifique y conduzca a la Iglesia en un nuevo capítulo de su historia.

  • B El Tip: Nombres como: Luis Tagle y Peter Erdo figuran entre los posibles sucesores, en un escenario donde la incertidumbre marca este momento para la Iglesia católica.

A medida que avancen las votaciones, la atención se centrará no sólo en las características personales de los papables, sino también en los gestos. Un nombre emergente puede captar adhesiones rápidas, pero también generar resistencias profundas. El arte de construir consensos en este contexto requerirá, más que nunca, de discernimiento, escucha y visión.

La elección del nuevo Papa será un mensaje al mundo, no sólo a los católicos. Una vez que se alcance el consenso y el humo blanco se eleve al cielo, las campanas de la Basílica de San Pedro repicarán anunciando el “Habemus papam”. Entonces, el Pontífice electo se dirigirá a la “sala de las lágrimas”, se revestirá con los hábitos papales y saldrá al balcón central para ofrecer su primera bendición Urbi et Orbi.

  • 133 Cardenales de 70 países ingresaron a la Capilla Sixtina

Consideran que sucesor debe abrirse a diversidad

El nuevo Papa no debe tener miedo a la diversidad sexual y religiosa; debe entender los cambios del nuevo siglo, lograr el regreso de la feligresía que abandonó el catolicismo y además, valorar los avances que lograron sus antecesores Francisco, Benedicto XVI y Juan Pablo segundo, afirmó Josué Tinoco Amador, experto en religiones de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Entrevistado en Al mediodía con Solórzano, de La Razón, el especialista dijo que a raíz de la muerte del sumo Pontífice, Francisco, ha habido presiones por encaminar hacia un nuevo papado, con un tipo de percepción política.

Indicó que el nuevo jerarca católico “debería reconocer justamente y quitarse el miedo a la diversidad sexual, a la diversidad religiosa, y en ese sentido incluimos mujeres LGBT. Un nuevo mundo está aquí, nos encontramos con un nuevo siglo y necesitamos un papado que responda a ese nuevo ciclo”.

Tinoco Amador rechazó hacer un pronóstico de quién será el nuevo Papa, pues “es complicado, y finalmente el Espíritu Santo es el que los va guiando y debe decirles quién”.

Sin embargo, estimó que habrá “humo blanco” antes del domingo, sobre quién será la persona que “les garantiza los cambios sin meter el acelerador, pero sin perder la parte teológica”.

El especialista refirió que la religión católica se conserva como mayoritaria en el mundo, pero desde el siglo pasado la afiliación decreció y en este momento 77% de la población mundial la profesa.