Estados Unidos impuso ayer nuevas sanciones contra las principales compañías petroleras de Rusia, Rosneft y Lukoil, acusando a Moscú de carecer de compromiso con un proceso de paz para poner fin a la guerra en Ucrania. El anuncio llegó mientras el Kremlin realizaba un ejercicio militar con misiles nucleares y la cumbre prevista entre Donald Trump y Vladimir Putin quedaba suspendida.
El secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, calificó las sanciones como “una de las medidas más severas” impuestas contra Rusia desde el inicio del conflicto en febrero de 2022. “Dada la negativa del presidente Putin a detener esta guerra sin sentido, el Tesoro sanciona a las dos mayores empresas petroleras de Rusia que financian la maquinaria bélica del Kremlin”, declaró Bessent.
- El Tip: Suecia firmó una carta de intención para exportar aviones de combate Gripen a Kiev en 2026, reforzando las defensas ucranianas tras casi 4 años de guerra.
La decisión marcó un giro en la política de la Casa Blanca, que hasta la semana pasada buscaba un enfoque más conciliador para lograr una tregua. El magnate explicó que canceló la reunión con Putin porque “no me pareció adecuada” y señaló que las conversaciones “no estaban avanzando hacia ningún resultado concreto”.

Escala tensión EU-Venezuela
Las medidas de Washington coincidieron con la aprobación por parte de la Unión Europea de un nuevo paquete de sanciones que incluye la prohibición de importar gas natural licuado ruso. Asimismo, Rusia lanzó misiles desde tierra, mar y aire, en maniobras que, según el Kremlin, “demuestran el nivel de preparación” de sus fuerzas nucleares.
- 3.1 millones de barriles de crudo al día exportan ambas petroleras
Trump, que se reunió con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, dijo que busca una “presión coordinada” para lograr un alto al fuego, pero se negó a proporcionar misiles Tomahawk a Ucrania. “No es el momento adecuado”, afirmó.
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, elogió la decisión estadounidense y europea.

