En abril, el consumo privado aumentó 1.1 por ciento luego de que en marzo se contrajo 0.2 por ciento; mientras tanto, en la comparación anual mostró un incremento de 0.7 por ciento, indicó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), a través del Indicador Mensual del Consumo Privado (IMCP).
El resultado positivo del cuarto mes puede tener origen en la depreciación del peso mexicano y en ese escenario las personas decidieron concentrar su gasto en los bienes y servicios nacionales frente a los extranjeros, indicó Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis Económico Financiero de Banco Base.
“No obstante, el crecimiento del consumo privado observado en abril debe interpretarse con cautela. Es posible que parte del dinamismo responda a un efecto temporal, ante la expectativa de mayores restricciones comerciales o presiones inflacionarias en los próximos meses”, agregó.

Operación Limpieza va contra cigarros, alcohol y mercancía mundialista en 2026
- El Dato: La proyección de crecimiento del Consumo Privado para el 2024 es muy superior a la del presente año, con un estimado de 2.6%; la de 2025 es de apenas 0.4%.
El impulso del consumo privado fue causado por un aumento de 1.5 por ciento del consumo de bienes y servicios nacionales; al interior de este rubro, la compra de bienes se incrementó 2.0 por ciento y de servicios, 0.7 por ciento. No obstante, la adquisición de bienes importados cayó 1.0 por ciento a tasa mensual.
Y en la comparación anual, “el gasto en bienes y servicios nacionales creció 3.1 por ciento, (el de bienes incrementó 4.5 por ciento y el de servicios, 1.3 por ciento) y en bienes de origen importado descendió 8.3 por ciento”, subrayó el Inegi.
Por su parte, Siller Pagaza destacó que el crecimiento en el cuarto mes del año, superó las expectativas del Indicador Oportuno del Consumo Privado (IOCP) que pronosticó un incremento de 0.8 por ciento en ciento a tasa mensual; aunque subrayó que entre enero y abril hubo un descenso de 0.44 por ciento. “En los primeros cuatro meses del año, el consumo privado total de México acumuló una caída de 0.44 por ciento anual, lo que contrasta con los crecimientos de 2.89 por ciento, 5.40 por ciento, 3.48 por ciento y 4.82 por ciento observados en los primeros cuatro meses de 2021, 2022, 2023 y 2024, respectivamente”, añadió la analista de Banco Base.
Está caída en el primer cuatrimestre, fue la primera contracción desde 2020 en el mismo periodo de tiempo, pero en ese momento inició la pandemia por el Covid-19, y es relevante, “pues el consumo es la partida más importante del Producto Interno Bruto (PIB) de México”, sostuvo Siller. Y acentuó que algunos de los factores que han limitado la recuperación del consumo privado en el país han sido el “deterioro en el mercado laboral, el deterioro de expectativas económicas, la debilidad en el flujo de las remesas, el regreso de las presiones inflacionarias y la alta tasa de interés”.
Finalmente, dijo que con estos datos la proyección de crecimiento del consumo privado al cierre de 2025 se mantiene en 0.4 por ciento, cifra muy inferior al 2.6 por ciento que se observó en 2024. “De concretarse este escenario, implicaría una desaceleración significativa del principal componente del PIB, lo que eleva la probabilidad de una recesión en México”, dijo.


