Presión fiscal, principal preocupación de la alta dirección en México

Los directivos de las empresas en México tienen inquietudes sobre el manejo fiscal que se buca hacer en el país, pues ven como riesgoso la posibilidad de que se planteen nuevas reglas parar de aumentar la recaudación, además de temer una mayor presión para transparentar sus movimientos ante el fisco, reveló la consultora internacional KPMG.

De acuerdo con el estudio “Global CEO Outlook 2021”, tres de cada cuatro encuestados mexicanos consideran que la presión ejercida sobre las finanzas públicas por la respuesta a la pandemia ha aumentado la urgencia de la cooperación multilateral en el sistema fiscal global.

Otro 72 por ciento de los grandes empresarios en el país siente una mayor presión para informar públicamente sus contribuciones al fisco, además de que 6.0 por ciento ve como principal riesgo los temas fiscales derivados de la pandemia para acelerar la recuperación económica.

Víctor Esquivel, socio director general de KPMG en México y Centroamérica, indicó que también hay un sentimiento de riesgo por parte de la alta dirección del país sobre el fuerte vínculo entre la confianza pública en sus negocios y cómo su enfoque fiscal se alinea con los valores de la organización, con 88 por ciento de las opiniones. 

“A medida de que la recuperación económica se ve y es necesaria alrededor del mundo, los gobiernos están presionados a financiar la recuperación a través de estímulos. Y existe un riesgo que los gobiernos volteen a aumentar normativas y traten de subir la recaudación con nuevas reglas fiscales que podría poner ciertos riesgos a los directores y altos ejecutivos”, explicó.

Asimismo, 76 por ciento de los CEOs en el país coincidió en que el impuesto mínimo global propuesto causa “inquietud significativa” de cara a los objetivos de crecimiento de su organización, lo que genera preocupación por los riesgos regulatorios, que son el cuarto temor más importante en el país, pero para el mundo ocupa el segundo sitio.

A la alta dirección de 50 empresas, que fueron encuestadas por KPMG en México, también le inquieta la disrupción que causan las nuevas tecnologías, agregó el experto.

La consultora internacional también expuso que, a pesar de sus preocupaciones fiscales, los directivos tienen mayor optimismo por la recuperación de la economía mexicana, que podría alcanzar 6.3 por ciento este año, de acuerdo con lo estimado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

El 86 por ciento confía en el crecimiento de la economía, lo que es mayor a la opinión promedio a nivel global, de 82 por ciento; mientras que 90 por ciento de los directivos mexicanos espera que su organización crezca, frente a 87 por ciento en las consideraciones de CEO internacionales.

“La pandemia puso a prueba la resiliencia de las organizaciones, cuyos directores vuelven a confiar en el crecimiento de la economía, lo cual ha fomentado que opten por estrategias de crecimiento orgánico e inorgánico. Esto pone de manifiesto la alta capacidad del CEO para enfrentar un mundo que, definitivamente, cambió con la pandemia”, dijo Víctor Esquivel.

El sentimiento optimista para la economía llevó a la dirección general a pensar en invertir en expansiones y transformación empresarial. Incluso, han identificado métodos de crecimiento inorgánicos como unión de empresas, fusiones y adquisiciones, y alianzas estratégicas como la principal estrategia de crecimiento para su organización, con 88 por ciento de los empresarios que declararon buscar alguna adquisición en los próximos tres años para ayudar al crecimiento y transformación de sus negocios.

Los riesgos para el crecimiento a tres años están orientados a tres áreas principales de riesgos, como las cadenas de suministro, la ciberseguridad y el cambio climático; en este sentido, 60 por ciento afirmó que, por el primer punto, su empresa ha estado sometida a mayor estrés durante la pandemia.

“La encuesta muestra que el objeto social o propósito; es decir, lo que representa la empresa y su impacto en las comunidades y en el planeta, está impulsando a 90 por ciento en México a actuar para abordar las necesidades de grupos de interés como clientes, empleados, inversionistas y comunidades”, concluye el estudio de KPMG.

avc