Según los Censos Económicos 2024, del Inegi, en 2023 en México había 7,093,631 establecimientos dedicados a la producción y oferta de satisfactores, que dieron trabajo a 36,592,279 personas, el 61.5% de la población ocupada. Del total de establecimientos 1,039,066, el 14.6%, operaron en zonal rurales y el restante 85.4%, 6,054,565, lo hicieron en zonas urbanas.
Por establecimiento se entiende una unidad económica fija, en un lugar determinado, que produce y/o ofrece bienes o servicios, por ejemplo: una fábrica, una tienda, un restaurante. Por empresa se entiende una entidad jurídica, formada por uno o más establecimientos, con un mismo propietario y una misma administración, por ejemplo: una empresa automotriz con varias fábricas, una cadena de supermercados, una cadena de restaurantes.
Según los Censos Económicos, en 2023 operaron en el país 5,468,180 empresas, tanto privadas como paraestatales (increíblemente el Inegi no reporta qué porcentaje fueron privadas y qué porcentaje paraestatales, la información exacta no está disponible, pero “se calcula” que fueron, más o menos, 200, el 0.004% del total), dieron trabajo a 27,965,433 de personas (el 47.1% de la población ocupada), y generaron $15,698,352 millones de valor agregado censal bruto (la diferencia, medida en unidades dinerarias, entre lo que la empresa produce y lo que gasta en factores de la producción), lo cual quiere decir que aportaron el 49.2% del PIB.

Cónclave para el regalo de Alito
Del total de empresas el 95.4% fueron micros (emplean hasta 10 personas), dieron trabajo al 41.4% del personal ocupado (que no hay que confundir con población ocupada, que abarca cualquier trabajo, siendo que personal ocupado se refiere, nada más, a quienes trabajan en empresas), y generaron el 16.1% del valor agregado censal bruto. El 4.5% fueron pequeñas y medianas (Pymes, emplean entre 11 y 250 personas), dieron trabajo al 29.9% del personal ocupado, y generaron el 29.8% del valor agregado censal bruto. Por último, el 0.2% fueron grandes empresas (emplean más de 250 personas), dieron trabajo al 28.7% del personal ocupado, y generaron el 54.2% del valor agregado censal bruto.
En lo que respecta a la composición del personal ocupado el 73.7% fue remunerado, el 23.4% fueron propietarios, el 1.6% fue personal contratado y proporcionado por otra razón social, el 1.3% fue personal por honorarios o comisiones, sin sueldo o salario fijo.
En lo referente a la participación de las actividades económicas en la generación del valor agregado (la diferencia entre el ingreso generado por la venta del bien o servicios y el costo de los factores de la producción necesarios para producirlos), las manufacturas aportaron el 34.4%; el comercio el 23.5%; los servicios privados no financieros el 17.4%; la minería el 7.0%; la electricidad, agua y gas el 2.3%; resto de actividades (ganadería, agricultura, silvicultura, pesca, construcción, transportes, correos, almacenamiento y servicios financieros y de seguros), el 15.5%.
Por último, en lo referente a la formalidad e informalidad, tenemos que el 35.7% de las empresas fueron formales y el 64.3% informales; que el 78.6% del personal ocupado trabajó en empresas formales y el 21.4% en informales; que el 96.4% del valor agregado censal bruto se generó en empresas formales y el 3.6% en informales.
Continuará.

