El asesinato de dos funcionarios del primer círculo de la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México cimbró la conferencia que ayer ofrecía la Presidenta Claudia Sheinbaum, quien tras confirmar y lamentar el doble homicidio, ordenó brindar el apoyo directo y necesario a la mandataria capitalina, Clara Brugada.
El hecho provocó que dentro de los primeros minutos de la rueda de prensa mañanera, el Gabinete de Seguridad federal y la propia mandataria se enfocaran en confirmar para después posicionarse sobre el asunto.
- El Dato: Un atentado de similar magnitud ocurrido en la Ciudad de México fue el que sufrió Omar García Harfuch el 26 de junio de 2020 cuando era titular de Seguridad en CDMX.
Apenas habían transcurrido seis minutos con 39 segundos de la conferencia; la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, hablaba de los resultados de las Jornadas por la Paz para reducir la incidencia delictiva, mientras la mandataria observaba atenta las diapositivas.
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El secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, recibió entonces un informe vía celular que lo hizo acomodarse sobre su asiento, y que buscó hacer llegar a la mandataria.
La titular de Comunicación Social de la Presidencia, Paulina Silva, tomó una tarjeta sobre la que escribió lo reportado vía mensaje para luego entregarla a la Jefa del Poder Ejecutivo, quien la leyó y miró al secretario de Seguridad, que de inmediato se levantó y caminó hacia ella.
García Harfuch volvió a su lugar, cruzó palabras con el resto del Gabinete, hizo una llamada telefónica mientras miraba hacia el frente. Después se fue detrás de las mamparas de la conferencia y continuó hablando.
Mientras tanto, la Presidenta Sheinbaum miraba las diapositivas y a la vez sujetaba sus manos al frente.
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Del otro lado, entre la prensa, que expectante ya había notado el inusitado movimiento, permeaba la incertidumbre y los reporteros se preguntaban unos a otros: “¿Ocurriría un atentado?, ¿se habrá fugado algún pesado?, ¿Trump habrá hecho otra amenaza comercial?”.
Para ese momento, ya había avanzado la conferencia y el Gabinete no era el mismo que entró: Rosa Icela Rodríguez revisaba el celular; el fiscal general de la República, Alejandro Gertz Manero, se tronaba los dedos; el titular de la Secretaría de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla también seguía los movimientos y entre todos intercambiaban miradas.
Tocó el turno de que García Harfuch, también exfuncionario capitalino, expusiera el informe de Cero Impunidad. Lo hizo llanamente sin enfatizar sobre alguno de los datos que leyó de corrido.
Cuando se abrió la ronda de preguntas, un reportero, Gaspar Vela, preguntó qué pasaba y la Presidenta pidió aguardar a que se confirmara la información recibida.
Transcurrieron alrededor de 20 minutos. Tras varias rondas de preguntas y luego de recibir varias tarjetas más, la titular del Poder Ejecutivo Federal abrió un paréntesis para confirmar el asesinato de la secretaria particular y de un asesor de la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
“Quisiera dar una información muy relevante. Por eso estábamos comunicándonos con el secretario. Teníamos información, pero fue ya confirmada: la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, acaba de emitir una tarjeta informativa”.
Precisó que desde el primer momento se giró la instrucción de apoyar desde la Federación a la Jefatura de Gobierno de la capital.
Indicó que el secretario de Seguridad giró instrucciones para que tengan todo el apoyo del Centro Nacional de Inteligencia, de la Subsecretaría de Inteligencia de la Secretaría de Seguridad; también se instruyó el apoyo de la Secretaría de la Defensa y de la Marina.
Subrayó que se hará una investigación profunda hasta dar con los responsables.
“Desde el Gobierno de México enviamos condolencias... Todo el apoyo que requiera la jefa de Gobierno. Vamos a llegar al fondo de esta situación y que haya justicia”. Y así transcurrió ayer la conferencia.
