Montarán tres piezas

Regreso de obras de Balanchine y Cenicienta, apuestas de la CND para 2026

Erik Rodríguez, director artístico de la Compañía Nacional de Danza, dice que este 2025 no pudieron estrenar El Corsario, por burocracia y tiempos; cierran con 140 mil asistentes

Bailarinas, ayer, durante un ensayo de El Cascanueces
Bailarinas, ayer, durante un ensayo de El Cascanueces Foto: Cuartoscuro

La Compañía Nacional de Danza (CND) tiene entre sus apuestas para 2026 montar tres obras de uno de los más importantes coreógrafos, George Balanchine (1904-1983): Serenata, Tschaikovsky Pas de Deux y Symphony in C, esta última nunca antes interpretada por la agrupación. Además, traerá de vuelta a los escenarios la versión de Cenicienta de Ben Stevenson, que en 2010 bailaron por primera vez, informó ayer su director artístico Erick Rodríguez.

“Balanchine es uno de los directores más importantes del siglo XX. Es muy importante para cualquier compañía bailar sus obras, aparte de que es un estilo diferente que reta. La forma de moverse, la velocidad, la técnica es completamente distinta y eso nos enriquece. Además de que nos da la oportunidad de proyectarnos internacionalmente: las personas que estén relacionadas con Balanchine ven hacia la compañía y eso, queramos o no, es una proyección internacional y nos da prestigio”, dijo Erick Rodríguez en entrevista con La Razón.

  • El Dato: La primera bailarina Elisa Carrillo, en enero próximo se integrará como titular en la  John Cranko School, en Stuttgart, Alemania.

Tschaikovsky Pas de Deux se considera un ballet muy virtuoso, pues implica una descarga de adrenalina, tanto para los intérpretes como para el público. Mientras que Symphony in C es una de las obras maestras del ballet neoclásico.

“Llevamos varios meses de negociación, ya nos los dieron (los derechos). Si todo sale bien en noviembre (de 2026), estaremos estrenando nuevamente obras de Balanchine”, dijo.

Aunque este año se tenía previsto el estreno de El Corsario, Erick Rodríguez compartió que enfrentaron diversos desafíos para llevar este clásico a escena.

“Estamos viendo si para un futuro próximo podemos traer El corsario a la compañía. Lamentablemente, no se pudo dar por tiempos, burocracia, dinero, hubo varios factores. Estábamos un poco presionados, principalmente por el tiempo. Empezamos la dirección en febrero, entonces todas las compañías normalmente trabajan con un año, dos de anticipación, poder amarrar todo y afianzarlo para noviembre, fue imposible”, explicó, y dijo que si bien para 2026 no está contemplado, sí buscará incorporarlo para más adelante.

A partir del próximo 31 de diciembre, la primera bailarina Elisa Carrillo dejará la dirección adjunta de la Compañía Nacional de Danza, por lo que ahora sólo encabezará la agrupación Erick Rodríguez. Al respecto, comentó que su visión será multifacética, es decir, encontrar un balance entre el ballet clásico, el neoclásico y la danza contemporánea.

“Mi mirada es multifacética: es importante que estén los clásicos, es uno de nuestros objetivos principales, sin lugar a dudas, pero considero que la compañía tiene que ser capaz de dominar todos los lenguajes. Por eso traemos a Balanchine, la Cenicienta de Ben Stevenson; vamos a tener una temporada contemporánea y este año igual tuvimos una. Está dentro de los objetivos preservar los grandes clásicos, quizás darle alguna relectura; El Cascanueces se va a hacer todos los años, tal vez hagamos El lago de los cines todos los años y por lo menos un clásico más”, comentó.

Dijo que se enfocará en seguir invitando a coreógrafos y maestros. “Justo mi sello personal iría un poco en la programación, en cómo ir trayendo diferentes coreógrafos, obras que no hemos tenido, seguir desarrollando a nuestros bailarines, a nuestros maestros, traer a más profesores invitados, enfrentar a nuevos retos a los bailarines y seguir enriqueciendo el repertorio”, dijo.

Comentó que esperan cerrar este 2025 con 140 mil asistentes, ya contando quienes acudirán a El Cascanueces.