A casi veinticuatro horas de los violentos hechos que causaron zozobra en la zona rural de Acapulco, la Fiscalía General del Estado de Guerrero informó que al menos cinco personas fueron asesinadas en el poblado conocido como “Kilómetro 30”, donde la noche del pasado lunes se registró un ataque armado.
Cuatro hombres y una mujer perdieron la vida durante los hechos delictivos sobre los que se abrió una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado.
Informes de la Fiscalía de Guerrero indican que derivado de las diligencias lograron el aseguramiento de cinco artefactos explosivos improvisados, un arma larga, cargadores, cartuchos, estrellas poncha llantas y siete vehículos, entre ellos una camioneta blindada.
Lo incautado fue puesto a disposición del Ministerio Público, mientras continúan las investigaciones sobre el caso a través de entrevistas, análisis de indicios “y otros actos ministeriales” que permitan esclarecer los hechos, según informó la Fiscalía.
Más temprano este 20 de mayo, el comisario del “kilómetro 30″, Adán Casarrubias Flores, confirmó que cinco personas murieron y otras tres resultaron lesionadas durante el ataque armado.
“Ayer, cuando sucedió eso, que terminó esa balacera entre ellos, ellos mismos tiraron al aire, desconozco cuál haya sido el motivo. A poco rato llegaron diferentes corporaciones, las personas que pasaron tirando dejaron abandonadas sus camionetas a la salida del pueblo", explicó.
En otra entrevista, el comisario mencionó que el ataque no fue contra un objetivo específico, sino que los agresores dispararon a aire; además, comentó que fue alrededor de las 20:20 horas cuando ingresaron al poblado tres camionetas.
“No vinieron en contra de nadie, no sé, desconozco, pero tardó alrededor de diez minutos. Fue todo rápido y ahí abandonaron esas camionetas", dijo.
Casarrubias indicó que se escucharon “explosiones fuertes”, aunque aclaró que “no sabría decir en realidad qué fue, si granadas” o explosivos, como sugirió un periodista.
Mientras tanto, desde la noche del lunes se desplegó un operativo coordinado con la participación de las Secretarías de la Defensa Nacional (Defensa), de Marina, Guardia Nacional, Policía Estatal y Fiscalía del Estado, para “verificar la situación, preservar el orden público y mantener el control territorial”.
La comunidad fue asegurada y permanece bajo vigilancia de las corporaciones.
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