El pleno del Senado de la República aprobó, en lo general y en lo particular, la reforma impulsada por la Presidenta Claudia Sheinbaum para fortalecer la soberanía nacional, en medio de un debate que se tensó ante un intercambio verbal entre Lilly Téllez y algunos miembros del bloque de la Cuarta Transformación.
Fueron 107 votos a favor y 14 en contra del grupo parlamentario del PRI, con los que la Cámara alta aprobó la reforma a los artículos 19 y 40 de la Constitución, con los cuales se refuerza la soberanía nacional y la prohibición de cualquier intento de intervención extranjera. La votación en lo particular culminó con 100 votos en favor y 17 en contra.
El jaloneo estalló cuando la panista Lilly Téllez afirmó: “La soberanía no está amenazada, los que están amenazados son los cárteles”, acusando al oficialismo de legislar en favor del crimen organizado.
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Sus palabras encendieron los ánimos. De inmediato, Adán Augusto López, líder de la bancada de Morena, y Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva, subieron a tribuna para responder.
“Si yo hubiera sido elegido por el pueblo de Sonora como senador de la República por Morena y me hubiera ido a la bancada de Acción Nacional, sería considerado traidor al pueblo de Sonora y al movimiento de transformación de este país”, reviró Noroña.
- El Dato: La presidenta dijo que la iniciativa establece que México, bajo ninguna circunstancia, aceptará intervenciones o intromisiones desde el extranjero.
La sesión siguió su curso, pero la tensión no cedió. En plena intervención de la morenista Lucía Trasviña, Téllez sacó un megáfono y comenzó a interrumpirla. Trasviña no dudó y le arrebató el aparato, desatando un altercado que obligó a la Mesa Directiva a decretar un receso.
Lejos de calmarse, el choque continuó. Andrea Chávez, vocera del guinda, lideró la defensa de Trasviña mientras Téllez, enardecida, gritaba a las morenistas y a la Mesa Directiva: “¡Narcos vendepatrias!”.
Previo al altercado, al presentar la iniciativa, Oscar Cantón Zetina, presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, e integrante de la bancada guinda, defendió la reforma que, parecía, sería votada por unanimidad.
Afirmó que este cambio responde a un mandato histórico del pueblo de México, el cual busca blindar la soberanía, además de reforzar la independencia ante cualquier intento de injerencia extranjera.
Explicó que la reforma no representa un ajuste normativo, sino un mensaje “claro y contundete”, de México al mundo, para que sepan que “está más fuerte que nunca”.
“México se transforma sin sometimiento a intereses externos, sin permitir que fuerzas ajenas dicten nuestro destino. El pueblo de México ha dicho basta a los tiempos del entreguismo, a las épocas en que se permitía que actores extranjeros intervinieran en nuestros asuntos internos”, dijo el morenista.
Carolina Viggiano, vicecoordinadora del PRI, advirtió que la reforma representa un riesgo diplomático, además obedece a una narrativa o una “propagada para eludir la responsabilidad”.
“No necesitamos esta reforma para defender nuestra soberanía. Este día han hecho uso de una frase de Juárez: ‘Entre los individuos como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es paz’. (La frase) ha sido un pilar de nuestra política exterior toda la vida, desde que somos una nación. Así es que no están descubriendo el hilo negro”, manifestó.
La minuta se envió a la Cámara de Diputados para los efectos legislativos que corresponden.
