Una vez que el INE dio por válidos los resultados de la elección judicial, en el PAN comenzaron a afilar argumentos legales para intentar anularla. Ayer sus dirigentes anunciaron que acudirán como “terceros interesados” ante la Corte y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en representación, dicen, de 90 millones de ciudadanos. Quieren echar abajo todo el proceso por vicios como los famosos acordeones, el bajo nivel de participación y la falta de controles sobre los candidatos. Sin embargo, la respuesta de Morena no se hizo esperar. Luisa María Alcalde, presidenta del guinda, recordó que la reforma judicial fue aprobada por mayoría calificada y con respaldo de congresos estatales, incluso de oposición. “Les molesta la democracia porque ya no pueden controlarlo todo por teléfono”, remató. Así mientras un bando impugna y el otro presume legitimidad, es difícil no tener claro que la elección se irá hasta lo último de lo último. El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

