Van más de 230 asegurados al año

Crimen acorazado: crece decomiso de vehículos “monstruo”

En últimos 5 años van incautados 643 con blindaje artesanal; operativos en Tamaulipas, Michoacán, Jalisco y Sinaloa

Destrucción de narcotanques por la FGR en Tamaulipas, en noviembre de 2024
Destrucción de narcotanques por la FGR en Tamaulipas, en noviembre de 2024 Foto: Cuartoscuro

En los últimos cinco años, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional han decomisado 643 vehículos con blindaje artesanal, conocidos como “monstruo”, en operativos desplegados principalmente en Tamaulipas, Michoacán, Jalisco y Sinaloa, según datos oficiales obtenidos vía transparencia por La Razón.

El anexo estadístico revela un crecimiento sostenido de los decomisos. En 2020 se registró el primer aseguramiento, en Reynosa, y en 2022, uno más, también en esa entidad.

A partir de 2023, los aseguramientos se multiplicaron: 117 vehículos ese año, 292 en 2024 y 232 entre enero y agosto de 2025. En total, suman 643 vehículos “monstruo” neutralizados, muchos de ellos con blindaje artesanal de placas de acero, torretas giratorias y adaptaciones para armas calibre .50, utilizados por grupos criminales para el control territorial en distintos estados del país.

  • El Dato: un narcotanque, también llamado rhino o monstruo, es un vehículo blindado artesanalmente con placas de acero, ametralladoras y rifles de francotirador.  

A nivel municipal, los datos muestran una alta concentración de aseguramientos en la frontera norte, en Tamaulipas, particularmente en Reynosa, Miguel Alemán y Camargo, que encabezan los registros con más de un centenar de vehículos asegurados en conjunto.

En la franja centro-occidental, destacan municipios como Buenavista, Apatzingán y Aguililla, en Michoacán.

Culiacán y Navolato, Sinaloa, son otros de los principales puntos de hallazgo. En ambas demarcaciones, los decomisos se incrementaron durante 2024 y 2025, coincidiendo con operativos de la Guardia Nacional y del Ejército para recuperar el control de corredores carreteros hacia Durango y Sonora. En Teocaltiche, Encarnación de Díaz y Lagos de Moreno, Jalisco, la Defensa reportó la recuperación de unidades empleadas en emboscadas y bloqueos carreteros.

  • 232 monstruos se decomisaron durante el 2025  

Para el especialista en seguridad Abraham Serrano, los vehículos “monstruo” son un símbolo del poder territorial de los cárteles. “Los primeros que los empezaron a utilizar fueron Los Zetas, por ahí de 2005 o 2006. Ellos tenían experiencia militar y necesitaban este tipo de vehículos para causar intimidación”.

Explicó que aquellos primeros modelos “eran rudimentarios, con una quilla al frente para abrirse camino, artillados con calibre .50, y usados como parte de una estrategia psicológica y táctica”.

Con el tiempo, “otros grupos como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) o los de Michoacán comenzaron una carrera armamentista para tener los mejores vehículos, mejor equipados y con mayor capacidad de destrucción”.

Serrano detalló que la mayoría de estos vehículos son robados: “Más del 99 por ciento provienen del robo de autos. La pérdida para los grupos criminales es mínima, pero su efecto psicológico es enorme: cuando llegan estos vehículos a una comunidad, los policías locales no pueden enfrentarlos y se repliegan”.

El experto en seguridad añadió que actualmente algunos de estos vehículos cuentan con cámaras externas, torretas giratorias, y sistemas para lanzar ponchallantas o controlar drones desde el interior. Aun así, aclaró que “el equipo de las Fuerzas Armadas puede destruirlos sin dificultad, ya sea desde helicópteros o con artillería terrestre”.

El investigador y académico de la UNAM, Javier Oliva, coincide en que los “monstruos” son un intento fallido de militarizar las capacidades del crimen.

“Con soldadura y planchas de acero se pueden hacer, pero son prácticamente inservibles porque los motores no están hechos para ese peso”, explicó. “Se vuelven muy lentos, de difícil maniobra, y esto los hace vulnerables”, añadió.

Oliva subrayó que, aunque las Fuerzas Armadas tienen capacidad técnica para destruirlos, las leyes internacionales y nacionales prohíben usar tanquetas artilladas en territorio nacional: “Una tanqueta puede liquidar rápidamente a estos vehículos, pero la ley no permite que sean usadas en ese contexto”.

Además, alertó que la zona donde más se ha desarrollado esta tecnología criminal es Michoacán, particularmente en la Tierra Caliente, donde se combina con minas hechizas y drones explosivos, lo que representa un nuevo desafío táctico para las fuerzas federales.

El experto añadió que actualmente algunos de estos vehículos cuentan con cámaras externas, torretas giratorias, y sistemas para lanzar ponchallantas o controlar drones desde el interior. Aun así, aclaró que “el equipo de las Fuerzas Armadas puede destruirlos sin dificultad, ya sea desde helicópteros o con artillería terrestre”.

Serrano recordó que Tamaulipas sigue siendo el epicentro del uso de estos vehículos: “Ahí los vamos a encontrar sin problema, porque fue donde los Zetas heredaron la práctica. Para ellos, es tan esencial como portar un cuerno de chivo o un R-15”.

En tanto, el CJNG y remanentes de Los Zetas los han extendido a Jalisco, Michoacán y Sinaloa, “modernizados, con más equipo y con apoyo de drones”.

Blindados
Blindados ı Foto: Especial