El grupo terrorista Hamas puso en pausa las liberaciones de rehenes a tres semanas de que inició el alto al fuego y cuando sólo ha entregado a casi la mitad de los 33 previstos en esta primera fase del alto al fuego.
Los terroristas justificaron que la decisión responde a una violación a la tregua al acusar que las fuerzas israelíes incumplieron las condiciones del proceso al presuntamente detener la ayuda humanitaria, bloquear el retorno de familias palestinas a la región devastada y hasta abrir fuego contra civiles.
El vocero el brazo militar de la organización, Abu Ubaida, expuso de acuerdo con medios y agencias que no habrá más entregas hasta nuevo aviso, cuando en Israel se esperaba la lista de los próximos cautivos a devolver el próximo 15 de febrero, y hasta intentó condicionar el acuerdo al advertir a Israel que si no “compensa” lo ocurrido se extenderá la interrupción a la tregua que entró en vigor el pasado 19 de enero con la mediación de Estados Unidos, Egipto y Qatar.
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Incluso, dicha organización destacó que sí ha acatado lo establecido al recordar que el pasado 8 de febrero liberó a Or Levi, Eli Sharabi y Ohad Ben Ami en un intento de evidenciar ante la comunidad internacional que es Israel el que se niega a cumplir lo pactado; mientras que fuentes en Tel Aviv recordaron que fueron los combatientes de Hamas los primeros en incumplir los acuerdos al sostener que el retraso en los envíos de suministros a la zona en poder de Hamas fue en consecuencia por la negativa de éstos de entregar a Arbel Yehud según los tiempos acordados, pues finalmente ocurrió días después.
En tanto, las familias buscan el apoyo de los mediadores para mantener los plazos previstos y no prolongar aún más este sufrimiento, pues quedan más de 70 israelíes en poder de los terroristas desde hace más de 490 días.
Incluso, la última liberación detonó nuevas críticas y reclamos a la comunidad mundial para acelerar la liberación total de las víctimas, incluyendo quienes fallecieron en los túneles o sólo retienen sus cuerpos, pues los hombres de entre 34 y 56 años retornaron con evidentes signos de deterioro físico, lo que médicos israelíes compararon con haber estado en un campo de concentración; por ello, quienes aguardan por el esperado reencuentro con sus familiares piden a la nación hacer todo lo posible para retomar la tregua y garantizar el retorno de los rehenes y no abandonarlos a su suerte, pese a que hay voces radicales en la región que insisten en retomar las armas y luchar contra los terroristas.
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LMCT
