El Papa Francisco se caracterizó por ejercer un pontificado más cercano a la gente, lo cual implicó una ruptura con algunas de las tradiciones más significativas que estaban relacionadas con la llegada a este cargo; una de ellas, fue su decisión de vivir en la Casa de Santa Marta.
Tradicionalmente, el sumo pontífice residía en el apartamento papal del Palacio Apostólico, un complejo de edificios que, además de servir como residencia para el líder del Vaticano, alberga oficinas y capillas.

Sin embargo, desde su elección como papa en 2013, Francisco optó por romper esta tradición y, en su lugar, residir en la Casa de Santa Marta. Con esto buscó adoptar un estilo de vida sencillo y cercano a la gente, pues su residencia en esta construcción le permitía acercarse más a los feligreses y no mantenerse aislado como, consideró, hubiera ocurrido en el Palacio.

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¿Cómo es la Casa de Santa Marta donde vivió y murió el Papa Francisco?
El Domus Sanctae Marthae o Casa de Santa Marta es un edificio que se ubica junto a la Basílica de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano.
Fue inaugurado en 1996 por el Papa Juan Pablo II con el objetivo original de alojar a los cardenales y prelados durante sus estancias en Roma, especialmente durante los cónclaves papales.

El edificio cuenta con 129 habitaciones, entre suites y habitaciones dobles y, desde 2013, es conocido por ser también el hogar de Francisco. De acuerdo con la prensa internacional, él vivía en una de las habitaciones sencillas, la 201, con mobiliario básico.
Asimismo, Francisco celebraba misa y compartía espacio en los momentos de la comida con otros de los residentes.

La Casa de Santa Marta es administrada por las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl y, además de ser el lugar donde vivió y murió Francisco, sirve como residencia para cardenales prelados.

Cuenta con restaurante, sala de reuniones, lavandería y varias capillas; además, está equipada para atender necesidades médicas y terapéuticas, como las que recibió el Papa Francisco en sus últimos meses.

Antes de su reconstrucción y de asumir estas funciones, el edificio fue con anterioridad una casa de asistencia para enfermos e, incluso, sirvió para refugiar a prófugos judíos y representantes diplomáticos que rompieron relaciones diplomáticas con Italia, durante la Segunda Guerra Mundial.

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