La política exterior de la Unión Europea volvió a exhibir sus fracturas ayer tras la presentación del informe del Servicio de Acción Exterior que documenta indicios de violaciones a los Derechos Humanos por parte de Israel en Gaza. Aunque la Alta Representante, Kaja Kallas, admitió que Tel Aviv ha incumplido el Artículo 2 del Acuerdo de Asociación, reiteró que el objetivo del bloque no es “castigar” sino “provocar mejoras concretas para la gente de Gaza”.
“El análisis es concluyente: hay que actuar. Pero la prioridad es detener el sufrimiento y asegurar un cambio real en el terreno”, declaró Kallas al término del encuentro entre los ministros de Exteriores de los 27. Si bien dejó la puerta abierta a futuras medidas en julio, no se anunció ninguna acción inmediata.
Por sus parte, el canciller español José Manuel Albares se posicionó como el vocero de la línea más exigente. Solicitó la suspensión del Acuerdo de Asociación con Israel, así como un embargo de armas y sanciones individuales contra responsables de socavar la solución de dos Estados.
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- El Dato: La Unión Europea tendrá que decidir si su compromiso con los derechos humanos se traduce en acciones concretas u optará por la vía del diálogo sin consecuencias palpables.
Albares pidió “valentía” a sus colegas para responder al informe europeo con medidas reales. “Ya no basta con declaraciones. La Unión Europea debe actuar conforme a los principios que dice defender”, sostuvo.
Su postura fue respaldada de forma parcial por países como Bélgica, donde el ministro Maxime Prevot señaló que la parálisis actual es “inaceptable” y reclamó compromisos concretos antes de la próxima reunión de julio.
Frente al llamado español, países como Italia y Alemania defendieron una aproximación más cauta. El ministro italiano Antonio Tajani reconoció el uso “desproporcionado” de la fuerza por parte de Israel, pero advirtió que cortar la relación diplomática complicaría tareas humanitarias esenciales, como el traslado de heridos o la entrega de los insumos médicos.
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Alemania, por su parte, insistió en mantener la cooperación. “La situación en Gaza es crítica, pero necesitamos buenas relaciones con Israel”, dijo Johann Wadephul, ministro alemán, quien destacó el papel democrático de Tel Aviv en la región.
Ambos gobiernos coinciden en la necesidad de un alto el fuego inmediato, pero rechazan la idea de medidas punitivas en esta etapa.
El documento presentado por el Servicio de Acción Exterior ha generado expectativas sobre una posible reconfiguración de la política europea hacia Israel. Sin embargo, las profundas diferencias internas han impedido una respuesta clara.
Según fuentes diplomáticas, la Alta Representante entregará el informe directamente al gobierno israelí, acompañado de una exhortación a mejorar de inmediato la situación en Gaza. No obstante, la falta de un consenso sobre sanciones pone en duda la eficacia de la estrategia europea.
“La UE no puede seguir ignorando lo que ocurre. El informe demuestra que hay incumplimientos y la credibilidad del bloque está en juego”, señalaron fuentes próximas al grupo español.
Ayer, al menos 43 palestinos murieron en varios ataques israelíes desde el amanecer mientras el ejército israelí ataca sin descanso el enclave, según fuentes médicas, el número total de muertos palestinos en la guerra supera la asombrosa cifra de 56 mil.
