Día de Muertos: industria que también es víctima del coronavirus

La pandemia de Covid-19 golpeó a muchas unidades de negocio, en fechas tan emblemáticas como el Día de Muertos no es la excepción, eso lo sabe Yuriria Independencia, artesana de papel picado en Xochimilco, uno de los elementos más representativos de esta época, quien recuerda que conforme avanzaba la pandemia tuvo que despedir a una parte de sus trabajadores, pues no pudo solventar sus gastos.

"Conforme avanzaron los meses tuve que hablar con los empleados. Les di la opción de buscar otro trabajo. Unos sí lo consiguieron y otros regresaron conmigo cuando pudimos reabrir. Con un colchón que tenía, préstamos familiares y un crédito los liquidé. Ahorita tengo 12 de los 19 que éramos. También con eso pasamos los cinco meses que no trabajamos", platica la artesana a La Razón.

La también empresaria de 46 años, asegura que aunque detectó que en sí misma la tradición de Día de Muertos motiva a la gente a comprar su producto, prevé una merma en las ventas que la llevó a tomar la decisión más complicada: despedir a sus trabajadores; y es que después de parar su producción por más de cinco meses tuvo darles la opción de buscar en qué ocuparse en otro lado a siete de sus 19 trabajadores. “Unos sí consiguieron, otros decidieron regresar”.

Datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reportaron que, entre marzo y junio de este año, se perdieron un millón 117 mil 584 plazas laborales a consecuencia del golpe económico que provocó la pandemia por coronavirus. El golpe más fuerte para el mercado laboral fue en abril, con 555 mil 247 vacantes destruidas; seguido de mayo, con 344 mil 526 empleos.

Las afectaciones económicas de la pandemia también golpearon el negocio de Ricardo López, comerciante del Mercado de Las Flores de La Merced, en la Ciudad de México, que desde hace 22 años se dedica a la venta de flores de cempasúchil, que reciben de Tlaxcala.

El vendedor de otro de los productos más representativos del Día de Muertos detalló que sus flores las vende en 60 centavos cada una, por lo que las ofertan al mercado por cientos más que por unidad. Precisó que el año pasado tuvieron un auge en ventas por los Desfiles de Día de Muertos en Reforma y los eventos de Coyoacán; eventos que este año fueron cancelados.

Para los mexicanos el Día de Muertos es una de las tradiciones más emblemáticas que tienen; sin embargo, este año la festividad se celebra en medio de cifras escalofriantes: hasta el jueves 29 de octubre se tenía el registro de 90 mil 773 muertes a causa de la enfermedad viral; una emergencia sanitaria que no se ha controlado en el país desde inicios de 2020 y que se prevé se mezcle a la influenza estacional.

Tal es la afectació n que cifras de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec) al cierre de 2020 habrán desaparecido hasta 300 mil micronegocios, y otros tantos temen el rebrote del coronavirus, pues puede orillar a las autoridades a decretar otra Jornada de Sana Distancia.

Desde octubre se dio a conocer que todos los eventos relacionados con la celebración del 1 y 2 de noviembre se suspenderían para evitar contagios en la capital. Incluso, hace días los Mexicráneos, esculturas monumentales que cada año adornaban Paseo de la Reforma, junto con la exposición de Alebrijes, fueron retirados para evitar conglomeraciones.

Otros estados que mataron la expectativa de celebrar Día de Muertos de forma presencial fueron: Aguascalientes, Oaxaca, Baja California Sur (Loreto), Hidalgo, Michoacán (lugar emblemático de esta celebración), específicamente Janitzio, y el municipio de Nezahualcóyotl, en el Estado de México; todas estas demarcaciones optaron por una celebración virtual. Los panteones tienen la misma suerte.

EL DESCENSO DE LAS VENTAS

La Confederación de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco Servytur) alertó que las medidas de confinamiento provocarán una contracción de 50 por ciento en las ventas de productos alusivos al Día de Muertos.

Según el organismo empresarial, en 2019 la derrama económica de este festejo fue de 19 mil millones de pesos, gracias a la compra de insumos y productos relacionados con la tradición y el flujo de turistas que aprovecharon la festividad para vacacionar; hoy no se esperan más de nueve mil millones de pesos.

El año pasado la comercialización aumentó con las flores, en 5.1 por ciento; hoteles, establecimientos de hospedaje moteles y transporte aéreo y terrestre, con 4.1 por ciento; ropa (con disfraces, entre otros), con 3.3 por ciento; restaurantes 3.1 por ciento; alimentos, abarrotes, bebidas y tabaco, con tres por ciento; y esparcimiento (cines, parques de diversiones, etc.) de 2.8 por ciento.

Sin embargo, para el negocio de Ricardo López el panorama es más complejo: esperan una reducción de 85 por ciento en sus ventas por las medias de confinamiento.

Resaltó que “sería muy irresponsable de mi parte quejarme de las ventas en estos momentos, pero sabemos que es una consecuencia normal dentro de la anormalidad que vivimos día con día”.

En cambio, para Yuriria Independencia la venta de papel picado tiene el panorama de descender 40 por ciento con relación a lo que ganaron el año pasado. Explicó que las compras empezaron desde principios de octubre, pero a partir del 31 de octubre comienzan a ver una contracción, porque la gente ya tiene material para sus altares.

El Pan de Muerto, comida típica de esta temporada, no tuvo una mejor suerte. De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa) este año los panaderos sufrirán una contracción en sus ventas de hasta 50 por ciento, en donde la venta de pan de muerto sólo les podría repuntar 10 por ciento, debido al bajo ingreso de las familias ante la crisis por coronavirus.

Según la Encuesta Telefónica sobre Covid-19 y Mercado Laboral (ECOVID-ML), que elaboró el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), de 32.9 millones de personas ocupadas, 23 por ciento trabajó desde casa como parte de las medidas de confinamiento; 42 por ciento disminuyó su jornada de trabajo; 46 por ciento vio reducidos sus ingresos; y 90 por ciento no recibió apoyos del Gobierno.

SE SUBEN A LA MUERTE

La otra cara de la moneda muestra a las grandes empresas que se sumaron a la celebración de Día de Muertos con productos, en su gran mayoría, de colección.

Por un lado, Barbie continuó celebrando a la muerte. Por segundo año consecutivo lanzó una muñeca conmemorativa del Día de Muertos; la primera, que se lanzó en 2019 hizo homenaje a la Catrina; mientras que en la edición 2020 tuvo una nueva edición.

Aunque los precios pueden variar por las tiendas en donde se vendieron, el precio promedio de ambas muñecas fue de mil 800 pesos; mientras que en reventa, la edición “Catrina” alcanza los 10 mil pesos y cuatro mil 500 pesos la Barbie 2020.

Asimismo, Disney no se quedó atrás y lanzó una edición especial de Minnie Mouse Catrina, a un precio de 700 pesos.

Las marcas de tenis Vans, Panam y Nike lanzaron al mercado colecciones por separado para homenajear a la muerte. Sus precios iban desde 1,300 pesos, 600 pesos y dos mil 699 pesos, respectivamente; aunque en el caso de Nike su reventa alcanza los seis mil 500 pesos en Mercado Libre.

SOBREVIVIENDO A LA PANDEMIA

Un posible rebrote de Covid-19 y la extensión inexacta del confinamiento hicieron que los comerciantes de La Merced y Xochimilco se previnieron con ahorros o cambios en su estrategia de mercado.

Yuriria Independencia declaró que pasando las festividades de Día de Muertos se podría dedicar a sus otros negocios: la venta de paquetes para celebraciones como cumpleaños o aniversarios; la venta de caretas y cubrebocas; así como la siembra.

La comerciante platicó que los cinco meses que pasaron sin poder trabajar también lo sobrellevaron con un préstamo que aceptó de la banca, el cual ya comenzó a pagar. “Se juntó con los pagos de servicios, como luz y agua”.

En tanto, Ricardo López diversificó sus métodos de entrega: vender en línea. “Hay muchos que tienen el temor de venir a la zona centro. Entonces lo que hemos implementado es recibir pedidos vía whatsapp y entregarlos en algún punto intermedio”. Afirmó no querer perder a esos clientes y generar algo de ingresos.